La casa que podemos ver en las fotografías se ha rehabilitado por completo, construida por los monjes Jerónimo en el siglo XII y convertida posteriormente en un molino de aceite, es hoy una vivienda actual, acogedora, transformada de tal modo que es capaz de seguir el ritmo de una familia de hoy en día.

La arquitectura original de esta antigua casa situada en Extremadura, se ha mantenido intacta debido al gran valor histórico que posee, sólo se han transformado los elementos básicos para actualizar la vivienda al modo de vida del siglo XXI.

El encargado de esta fabulosa rehabilitación es Ricardo Elizondo, arquitecto que ha llevado a cabo todas las remodelaciones necesarias.

En su interior destacan las líneas austeras y el empleo de materiales y colores naturales que combinan a la perfección con los tonos oscuros de las paredes de piedra y que da al lugar un aire especial y sobre todo muy acogedor.